¿Existe el riesgo en el embarazo por el aumento o la disminución de los vasos sanguíneos?
Comienza Ciclo de Coloquios impulsado por PMI UVA 1402 de Innovación en Salud
Carlos Escudero, profesor asociado de la Universidad del Bío Bío, dictó charla sobre estudio que plantea interrogante sobre si existe el riesgo en el embarazo por el aumento o la disminución de los vasos sanguíneos.
¿Existe el riesgo en el embarazo por el aumento o la disminución de los vasos sanguíneos?
Carlos Escudero, profesor asociado de la Universidad del Bío Bío, dictó charla sobre estudio realizado en primera sesión del ciclo de coloquios 2016 del PMI UVA1402 "Desarrollo de una plataforma Interdisciplinaria para la Innovación en Salud: Un Referente Internacional en el Desarrollo de Medicina de Precisión".
Con una interesante charla sobre el “Rol de los receptores A2A de adenosina en la angiogénesis", se inició el ciclo de coloquios organizado por el Proyecto PMI UVA 1402 "Desarrollo de una plataforma Interdisciplinaria para la -Innovación en Salud: Un Referente Internacional en el Desarrollo de Medicina de Precisión" realizada en la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso.
La conferencia, que tuvo como expositor al doctor Carlos Escudero, quien es profesor asociado y jefe del Laboratorio de Fisiología Vascular de la Universidad del Bío Bío, contempló la exhibición de los resultados preliminares que presenta la investigación que éste realiza, al alero de los Proyectos Fondecyt 1140586 y Fondequip EQM140104 y con el apoyo del Group of Research and Innovation in Vascular Health (GRIVAS Health).
“El problema que estamos interesados en investigar es cómo se forma un vaso sanguíneo. Para la gente es familiar este concepto que es la estructura por donde circula la sangre. Esta formación es un fenómeno que ocurre solo bajo ciertas ventanas de tiempo y en circunstancias limitadas como la cicatrización de heridas o posterior a un daño de los tejidos, por ejemplo”, explicó el médico e investigador.
Añadió que específicamente su estudio se centra en el embarazo normal y patológico. “La placenta por sí misma es un tejido cuya estructura fundamental son los vasos sanguíneos. Nuestro equipo está interesado en entender cómo se forman estas estructuras, cuyo proceso es bastante complejo, y luego buscar explicar alteraciones que ocurren en placentas provenientes de embarazos hipertensos”, indicó.
El profesor explicó que “la célula que participa en este proceso es la célula endotelial, que recubre internamente el vaso sanguíneo. Cuando se va a formar un vaso sanguíneo, esta célula recibe señales del tejido circundante y entonces empieza a aumentar el número, para luego migrar al sitio que necesita para formar una estructura tubular. Esos procesos de proliferación, migración y formación se pueden simular en el laboratorio”.
Formación y condiciones de estrés
El doctor Escudero sostuvo que una vez que estos procesos están simulados, “uno puede poner distintas moléculas para ver si estas aumentan o no la capacidad de formación de vasos sanguíneos. Una de las moléculas que a nosotros nos interesa es la adenosina, la cual es un metabolito de la principal fuente de energía de la celula, el ATP. Entonces, en condiciones de estrés, cuando se requiere la formación de un vaso sanguíneo, la célula lo que hace es liberar ATP hacia afuera y este ATP se transforma en adenosina”.
“Esta adenosina, al pegarse a esta célula endotelial y estimular estos fenómenos de proliferación, migración y formación de tubos es capaz de promover la formación del vaso sanguíneo”, agregó.
En cuanto al embarazo normal, el investigador explica que “en condiciones normales, la placenta es una red vascular que permite el paso de nutrientes desde la madre al feto, obviamente mediante un sistema sanguíneo que permite esta funcionalidad”. Mientras, en un proceso patológico, señala que “puede haber un aumento del número de vasos sanguíneos o una disminución. Cualquiera de las dos opciones va a afectar el normal desarrollo del nuevo ser”.
Riesgos
En cuanto a los riesgos, el investigador expone que “a nosotros nos interesa la placenta, pero no simplemente porque es el tejido de intercambio, sino porque la placenta por sí misma es un tejido fetal. La placenta se forma a partir de las células que también van a formar el feto. Por tanto, si vemos una alteración de esos procesos en la placenta es posible que esos mismos procesos estén alterados en el feto”.
Asimismo, manifiesta que “uno pudiera pensar por ejemplo que si la hija o hijo de una madre con hipertensión tiene una disminución de la formación de vasos sanguíneos, entonces si por alguna razón tiene una herida -porque el bebé puede nacer completamente normal-, cuando requiera formar vasos sanguíneos ahí es el momento en que se puede manifestar algún problema, ya que se puede demorar en cicatrizar”.
“Otro ejemplo es que cuando sea adulto y tenga alguna complicación cardiovascular, como un infarto, es más difícil que se recupere porque la regeneración del tejido estaría reducida. Sin bien esto es posible suponer, aún no está comprobado, y por ello nuestro grupo está haciendo algunos esfuerzos con el fin de comprender mejor estos fenómenos y sus alteraciones”, agrega.
Por otro lado, declara el investigador de la Universidad del Bío Bío que esta situación también podría proteger a una persona de otra enfermedad. “Existen condiciones en las que se necesitan más vasos sanguíneos, por ejemplo para el cáncer. En el cáncer claramente se forman más vasos sanguíneos, pero el individuo que tiene esta alteración de los vasos, padece una deficiencia, por tanto podría estar eventualmente protegido para generación de cáncer”.
“Todo esto que estoy hablando tiene sustento epidemiológico. Los recién nacidos que nacen de madres que tienen hipertensión del embarazo, tendrían mayor riesgo de infartos, pero menos riesgo de cáncer. Por ello pensamos que el fenómeno podría estar presente en el bebé, a pesar de que nosotros estemos buscando en la placenta”, asegura.
Ciclo de coloquios
Para Sebastián San Martín, encargado del PMI UVA1402, la visita del investigador Escudero “es de vital importancia, ya que nos interesa contar con estos coloquios o seminarios de manera periódica, con el fin de que permitan dar a conocer a la comunidad universitaria y a los académicos que forman parte del PMI, lo que se está desarrollando en el ámbito de innovación en salud, desde el punto de vista de los colegas en el ámbito nacional e internacional”.
“Esto tiene dos objetivos principales, que son dar a conocer lo que existe hoy en día en investigación en salud en otras instituciones, y al mismo tiempo permitir la generación de lazos de colaboración entre los integrantes del PMI con estos académicos que están siendo invitados a cada uno de los coloquios”, puntualiza.